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Lucha contra el Cáncer 26 de octubre

Ir a terapia cuando se tiene cáncer es crucial por varias razones, ya que la enfermedad afecta tanto a nivel físico como emocional.

Publicado el 21 Oct 2024

A continuación, te explico algunas de las razones más importantes:

1.- Procesar el impacto emocional: El diagnóstico de cáncer suele generar un gran shock emocional. Las personas pueden experimentar miedo, ansiedad, tristeza, e incluso depresión. La terapia ofrece un espacio seguro para procesar estas emociones y encontrar maneras saludables de enfrentarlas.

2.- Manejo del estrés: El tratamiento del cáncer (quimioterapia, radioterapia, cirugías) puede ser largo y agotador, lo que provoca altos niveles de estrés. La terapia ayuda a las personas a encontrar mecanismos para reducir este estrés y mejorar su calidad de vida.

3.-Fortalecer la resiliencia: Enfrentar el cáncer requiere una enorme fuerza mental. Los psicólogos pueden ayudar a las personas a desarrollar resiliencia, es decir, la capacidad de adaptarse y sobreponerse a la adversidad. Esto es fundamental para mantener una actitud positiva frente a la enfermedad.

4.-Mejorar el autocuidado y la adherencia al tratamiento: El estado mental puede influir en la forma en que una persona cuida de su salud física. A través de la terapia, se pueden abordar barreras psicológicas que impiden seguir el tratamiento de manera consistente, ayudando a que el paciente tenga una mejor adherencia al plan médico.

5.-Apoyo en la toma de decisiones: El tratamiento del cáncer a menudo requiere tomar decisiones difíciles y que generan ansiedad. La terapia ofrece un espacio para explorar miedos, dudas y preocupaciones, ayudando al paciente a sentirse más seguro en sus elecciones.

6.- Mejorar la relación con los seres queridos: El cáncer también afecta a las familias. La terapia puede facilitar la comunicación con los seres queridos, ayudar a resolver conflictos emocionales y fortalecer las relaciones durante este período de alta presión.

7.- Manejo del dolor y los síntomas: El dolor físico y los síntomas del cáncer o su tratamiento pueden agravar el malestar emocional. La terapia puede incluir técnicas para manejar el dolor, como la relajación o la visualización, lo que puede influir en la percepción del malestar físico.

8.- Prepararse para lo incierto: El cáncer implica una gran incertidumbre, tanto en términos de pronóstico como de cambios en la vida personal. La terapia ayuda a las personas a lidiar con esta incertidumbre y a encontrar un equilibrio emocional a pesar de no tener control total sobre su situación.

 

La terapia psicológica durante el cáncer no solo se enfoca en mejorar el bienestar emocional, sino que también puede tener efectos positivos en la salud física, ya que un mejor estado mental puede influir en el curso del tratamiento y la recuperación.

 

 

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